jueves, 26 de abril de 2012

Fábula. La gran competición

En un tranquilo y hermoso lugar, vivía Aurelia una perrita muy trabajadora y dos manzanas más allá, Alberto, un perro muy inteligente.
Los dueños de ambos llevaban a sus mascotas a entrenar para competiciones caninas. Aurelia y Alberto se llevaban muy bien, nunca se peleaban y eran muy buenos amigos.
Era una mañana de competición, Aurelia y su dueña estaban muy nerviosas e ilusionadas, ya que al igual que Alberto y su dueño llevaban meses preparándose para la competición
La perrita ya estaba lista y había llegado al recinto donde tendría lugar la competición.
Quedaban unos pocos minutos para que comenzara el evento y Alberto aún no había llegado, esta empezó a preocuparse por él.
Unos minutos más tarde cuando hubo terminado la competición y Aurelia quedó la primera, llegó Alberto apresurado, pero ya era demasiado tarde, se había quedado dormido.
Desmotivado regresó a casa con la perrita.

La moraleja de esta fábula es "A quien madruga dios le ayuda"
Carmen María

viernes, 13 de abril de 2012

El cambio climático

Descomposición de objetos

Cada día debemos de estar más concienciados con el planeta Tierra, ya que consumimos más de la cuenta.
Por ejemplo, la contaminación es uno de los principales problemas que sufre nuestro planeta. Muchos de nosotros tiramos cosas, objetos, alimentos etc. al suelo sin darle importancia de que puede tardar meses, incluso años en descomponerse y depende de que residuo se trate puede ser perjudicial, no solo para los seres vivos, sino que también para la Tierra en general.









Una botella de plástico tarda en descomponerse de 100 a 1.000 años










Los chicles tardan en descomponerse unos 5 años










Las latas de refrescos u otras bebidas tardan en descomponerse 10 años










Las muñecas de plástico tardan en descomponerse unos 300 años












Las botellas de vidrio tardan en descomponerse unos 4.000 años










Los  envases tetra-brik tardan en descomponerse alrededor de 30 años













Las pilas tardan en descomponerse 1.000 años

miércoles, 11 de abril de 2012

Un poco de lectura

Nuestra tutora nos ha mandado para deberes de vacaciones hacer un resumen de un libro que nos tenemos que leer. Yo he elegido uno de Geronimo Stilton, titulado "El extraño caso del volcán apestoso". Ya me queda poco para terminar de leermelo y de momento me está gustando bastante, ya que el libro es de misterio e intriga, pero sobre todo de humor también.
Os animo a que lo leáis porque seguro que os va a gustar.
Aquí os dejo la reseña del libro:

EL EXTRAÑO CASO DEL VOLCÁN APESTOSO
Como siempre...Metomentodo me ha liado en un extraño caso.
Una tremenda nevada ha bloqueado toda la cuidad de Ratonia, ¡aunque estamos en verano! Para resolver el misterio, tendremos que viajar en un trineo a pedales hasta el volcán Apestoso, en el valle de la Peste Oscura...¡Ah, qué aventura tan impresionante en el hielo!





martes, 10 de abril de 2012

El Bando de la Huerta

El Bando de la Huerta es una fiesta típica de Murcia y las pedanías que pertenecen a su ayuntamiento. Puesto que para Murcia y sus pedanías es un día festivo.
Se realizan actos como una Misa Huertana frente a la fachada barroca de la catedral, seguido de una procesión con la imagen de la Virgen de la Fuensanta, patrona de la cuidad.
A lo largo de la mañana en las plazas, parques etc. acude multitud de murcianos a celebrar este día, bien por su propia cuenta o en las famosas barracas que las peñas huertanas instalan. Es típico una comida huerta en la que se incluye tocino, salchicha, morcillas, arroz, michirones, ensalada murciana...y sobre todo los paparajotes.
El día del Bando es una explosión de color y de alegría en la que participa toda la ciudad y la huerta, bien desfilando o bien como público. Asimismo el visitante no puede sustraerse a la alegría y el júbilo reinantes, y sentirse feliz de participar en un acontecimiento de esta magnitud. La ciudad este día se convierte en una singular Huerta en la que decenas de miles de personas de todas las edades se lanzan a la calle con la vestimenta típica local. Ellos, con los zaragüeles, chalecos y monteras (gorro huertano), y ellas con los bellos refajos (faldas), delantales y mantones. Sin embargo, en los últimos años los jovenes especialmente han abandonado la tradición. Muchas mujeres se visten ahora de hombre huertano alegando una mayor comodidad. Otro gran numero de jóvenes ya no usan esparteñas o no llevan el traje al completo.



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